At. Cardedeu 3 - At. Ciutadella 1

Anoche nos fuimos todos a acostar reventados, con ojeras, doloridos, pero con una sonrisa dibujada en la cara y la satisfacción de que, al menos por un encuentro y medio, hemos saboreado de nuevo las buenas sensaciones que alcanzamos hace dos temporadas. ¿La receta? La que aplicamos en esa época: Seguridad atrás, concentración e intensidad como equipo y eficacia arriba.

La primera parte: por fin nos reconocemos de nuevo

Los primeros compases del encuentro dejaron entrever que iba a ser un partido difícil para los dos equipos. El Ciutadella dispuso de la pelota algo más que nosotros, pero se encontraba una y otra vez con un equipo muy bien posicionado y fuerte atrás. El presi dispuso de inicio una defensa paleolítica, pero ésta se apropió del dicho de "quien tuvo, retuvo" y demostró que no es obligatorio ser un portento físico para jugar atrás. El plus de inteligencia que te da la experiencia es un tesoro cuando se utiliza en la retaguardia, y ayer Chucky y Dani iluminaron la línea defensiva con un derroche de colocación, anticipación y contundencia.
Pero como es imposible que una defensa sola contenga a un rival del nivel del At. Ciutadella, el medio campo entero se puso las pilas, achicando espacios, no perdonando un control largo del rival, haciendo las faltas necesarias y circulando la pelota como hace muchos partidos no se recuerda.

La delantera hizo perfectamente lo que tenía que hacer, estorbar la salida del balón haciendo que muchas veces no le quedase otra opción a la defensa rival que utilizar unos desplazamientos en largo que caían en nuestras redes. El detalle que me llamó la atención en la primera parte es que nuestros puntas esta vez presionaron, con todos los respetos, sin hacer el primo corriendo sin sentido detrás del balón. Fueron cuando había que ir y mantuvieron la posición tapando huecos cuando no había opciones claras de alcanzar el esférico.

Durante la primera parte supimos sufrir, porque este Ciutadella tiene mucho mejor equipo de lo que dicen sus resultados. Cada jugada a balón parado era peligro de gol por la gran altura de muchos de sus jugadores y sus puntas eran de mucho nivel, pero el escenario que planteamos y nuestro buen hacer propició que llegase el merecido premio rondando la media hora de partido. En un balón largo, el Barrilete Cósmico Cristóbal pisó el área rival y con valentía encaró a su par, que no pudo hacer otra cosa que zancallidearle al verse superado. Chucky fue el encargado de materializar el penalti engañando muy bien al portero.

Ponernos por delante en el marcador afianzó la buena actitud que habíamos demostrado y sacó un poco de quicio al rival, que empezó a perderse en discusiones con el árbitro. Antes del descanso, Álex se sumó a la reivindicación de los Santecchia, enganchando un balón dividido en el área del Ciutadella que acertó a materializar un 2-0 que se mantuvo hasta el descanso.

Segunda mitad: más sufrimiento, expulsiones, el clímax.

La segunda mitad fue más o menos una prolongación de lo que sucedió durante la primera. El At. Cardedeu bien plantado atrás concediendo pocas ocasiones de gol y el Ciutadella intentándolo de todas las maneras posibles, pero sus ataques caían una y otra vez en nuestra telaraña. Quizá las ganas de lucirse de Julián provocaron la ocasión más clara del rival al disfrazarse de Valdés y dejar un mal despeje en los pies de un atacante al que le debió dar la risa, porque su definición estuvo a la altura del regalo de nuestro portero.

Por nuestro lado, lo que quizá podemos echarnos en cara es que perdimos algo de la lucidez a la hora de mover la pelota, pero ayer estábamos en estado de gracia. Y como muestra el debut en esta temporada de El Pulga, que hasta estando medio lesionado saltó como una moto y él solo llevó de cabeza a toda la defensa en un par de ocasiones.

El partido discurrió por los mismos derroteros, pero nos llevamos un buen susto al encajar el 2-1 en una jugada aislada. Por un instante, a todos se nos apareció el fantasma del partido que jugamos con ellos el año pasado en su casa, donde íbamos ganando 0-2 a falta de 5 minutos para terminar en encuentro y acabamos cediendo un empate, pero esta vez supimos echar el cerrojo y tirar de oficio no dejándonos sorprender. Habíamos hecho bien nuestro trabajo, porque a pesar de la distancia mínima en el marcador, el Ciutadella todavía estaba bajo el síndrome de verse superior y no poder refrendarlo, lo que sembró en ellos la semilla de la desesperación que germinó en forma de dos expulsiones consecutivas por discutir con el árbitro, hasta el punto de que tras la segunda expulsión, "Palomo" se encaró desafiante con el trencilla, aunque por suerte no pasó a mayores.

Con el final de partido tan de cara, buscamos cerrarlo. Primero con un disparo de Álex con el exterior que no cogió la rosca necesaria, luego con un mano a mano de Alberto que el porteró desbarató y finalmente dimos en la diana con una cabalgada de Marcos a lo Jordi Alba en la final de la Eurocopa. El tío en el minuto 90 se pega una carrera de 70 metros y aún le sobra aire para definir con tranquilidad por el palo corto. Como escribió Valle-Inclán: "Me quito el cráneo".

Conclusiones

No somos los más jóvenes de la categoría, ni los más rápidos, ni los más técnicos, pero tenemos un grupo muy unido que cuando se pone a remar en la misma dirección es capaz de ganar en el campo del líder, remontar un 4-1 de la primera mitad o desquiciar a cualquier rival. La clave es ser capaces de ver individualmente hasta dónde podemos llegar cada uno y aportar al equipo lo mejor que sepamos hacer, ni más, ni menos.
Ayer escuché más de una vez cómo se lamentaban en las filas del Ciutadella comentando entre ellos "si no tienen nada, si no tienen nada". Esto chavales, es el mejor reconocimiento y la demostración de que la de ayer es la mejor forma en la que podemos jugar. A veces no será suficiente, pero haciéndolo volveremos a irnos a dormir muertos, pero felices.


At. Cardedeu 3 - At. Ciutadella 1
Goles: Chucky (p), Álex, Marcos


 Lo mejor 

• La visita de Álex y sus muletas
• El "Espíritu Bufalá" se nos apareció de nuevo
• Julián ejerciendo de libre
• Toni otra vez echando el resto robando balones e incordiando al rival
• La vuelta de El Pulga y Zizou
• Un sólo gol encajado
• La segunda victoria consecutiva
• La improvisada pareja de centrales estuvo tan espectacular que hasta mandaron a Poche a la medular.
• Marcos secando al mejor jugador rival hasta el punto de hacer que cambiase de banda y especializándose en cerrar partidos
  
  

 Lo peor 

• La expulsión y consiguiente partido de sanción para Álex

Saludos, ¡y a comentar!
Javi